ANTIGUA GUATEMALA: LOS ÚLTIMOS VESTIGIOS DE LA HERENCIA ESPAÑOLA
Durante mi segundo día en la nación de los chapines decidí hacer una pequeña visita a un famosísimo lugar cultural e histórico al que, como arquitecto y amante de la historia no podia dejar de conocer: La Ciudad de Antigua, la cual fue la capital del país hasta que las erupciones y los volcanes obligaron a su traslado hacia la actual Ciudad de Guatemala. Un recorrido de hora y media por estos preciosos y fríos paisajes montañosos que caracterizan la región fue el preámbulo a mi llegada a la pequeña ciudad... Esta levantada en medio de un fértil valle con temperaturas de 22 grados centígrados y rodeada de preciosas zonas agrícolas cultuvadas por los campesinos e indígenas. Al llegar, una esbelta y elegante estatua en honor a los jesuitas, elementos claves en la culturización del nuevo mundo durante de la colonización española, te invita a recorrer las calles. Pintorescas fachadas de múltiples colores se ven por doquier entre rodaduras empedradas y tranquilas. Pequeñas carretas tiradas por caballos, un par de indigenas con sus espectaculares trajes de color y cestas sobre la cabeza..pero sobre todo.. la música típica que circula por el aire, te transportan hacia el pasado, logrando sentir en su máxima expresión que has llegado a centromerica y formas parte del corazón de la América Latina.
Al cruzar una esquina empiezan a asomarse las imponentes ruinas de la época colonial. Macizas y voluminosas fachadas que siglos atras formaron parte templos, conventos, palacios y edificios que albergaron el poder de las instituciones españolas en America, aunque tarde o temprano sucumbieran ante las fuerzas de la naturaleza.
Pero sobre toda esta obra de la humanidad, se levanta imponente la vasta silueta del Volcán de Fuego...poderoso gigante que domina el horizonte azulado de el valle....como un vigilante eterno y omnipotente.
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